Obviamente, la alimentación no va a producir el fin de la patología, pero si puede mejorar en gran medida el día a día de la persona.

SIBO, intolerancia a la lactosa, intestino irritable, diabetes y un largo etcétera, pueden mejorar o controlarse mediante una alimentación y pauta de medicación adaptada y personalizada.

Cualquier duda sobre nuestro trabajo o sobre la patología que padeces, ponte en contacto con nosotros.